Ángel Torres, presidente y propietario del actual Getafe, posa en el Coliseum. Según es disuelta aquella sociedad, el presidente Antonio de Miguel argumenta que la única posibilidad de seguir teniendo un equipo de fútbol sin tener que empezar desde cero, es decir, partiendo desde Tercera Regional Ordinaria como marcaba el Reglamento, era ocupar la plaza del Getafe Promesas, que estaba en Segunda Regional.